La docencia aparte de ser un arte, el arte de enseñar para la vida
y formar hombres de bien, los que más tarde se convertirán en ingenieros,
doctores, licenciados o docentes; es de igual manera una profesión altruista,
porque los docentes con ética se comprometen a ayudar a los demás, en este caso
a los alumnos, sin recibir nada a cambio, dan sin esperar nada más que la
satisfacción de verlos salir adelante y haber contribuido al desarrollo
espiritual y a la formación de un hombre competente e intelectual, un
profesional.
Las tecnologías
de la información poseen gran poder, el cual es usado para bien o para mal;
porque se trata de procesos tecnológicos y como se sabe, es más fácil fijarse
solamente en el progreso técnico, sin tener en cuenta que la técnica, no es más
que el producto para transmitir unos determinados contenidos. Hoy, la
televisión, la radio, los móviles, los videojuegos y la Internet, forman parte
de un conjunto de medios de comunicación, que expone a los jóvenes a
influencias más directas y universales que los medios tradicionalistas, de
igual manera ponen al alcance de éstos posibilidades de entretenimiento y de
información, más incontrolables. (Campos, 2009).
Por lo tanto sería de gran importancia y efectividad
que los docentes aprovechen este cambio e incluyan en su currículo y modelos de
instrucción el uso de las tecnologías, como parte de la demanda de esta
sociedad, porque como sabemos no se deben encerrar en sus aulas con los modelos
tradicionales de enseñanza y hacer de cuenta que no esta pasando nada ahí
afuera, cuando en realidad pasa mucho; el docente debe formar a sus estudiantes
en el uso de estas tecnologías, prepararlos para enfrentarse a estos medios y
tomarlos de una manera positiva de formación y no de deformación.
Es papel del docente instruir a los estudiantes en el
uso racional y educativo que se les puede dar a estos medios de comunicación.
Los educandos deben tomar a la tecnología como un
medio y no como un fin, es decir, como herramientas y materiales de
construcción que facilitan el aprendizaje, el desarrollo de habilidades y
distintas formas de aprender, estilos y ritmos de los estudiantes. Esto lleva a
que dentro de la educación se involucren varios medios para complementar el
proceso enseñanza-aprendizaje.
Concluyo mencionando que nosotros como docentes tenemos la gran responsabilidad de
formar personas de bien y preparadas para los cambios y el caos que se está
viviendo en este siglo. Ya que en este siglo XXI habrán muchos problemas:
ambientales, de valores, etc. Tal vez no podremos cambiar al mundo pero sí
hacer la diferencia, ya que el resultado no depende de nosotros, pero el
esfuerzo, sí.
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